El propio desarrollo energético

El mejor propósito que puede albergar una persona humana es el compromiso con su propia evolución y desarrollo. Nada en la vida le va a reportar mayor beneficio, tanto para sí misma como para todo lo que le rodea. La vida es un conjunto de posibilidades que venimos a experimentar para nuestra propia transformación y crecimiento a todos los niveles, conociéndonos a nosotros mismos y a todo lo que nos rodea profundamente, con el fin de actuar de la mejor forma posible con la intención de beneficiarnos, de respetarnos y para desarrollar el amor, la paz y la luz. El único propósito de nuestra vida es llegar al conocimiento de la verdad, comprender su sentido y nuestra finalidad al vivirla. Esto ocurre poco a poco conforme el hombre va profundizando en su interior, desarrollando su propio discernimiento, su consciencia y su intuición. El conocimiento interior de uno mismo, nuestro comportamiento y la observación de lo que nos rodea, nos proporcionará el entendimiento necesario y el desarrollo de nuestra inteligencia, dando lugar a la sabiduría. Esto le proporciona a la persona el desarrollo de la fortaleza y unos valores muy profundos con unas convicciones muy arraigadas de su propia valía como ser humano. Aprendiendo el verdadero sentido de la libertad, la justicia, el amor, la responsabilidad sobre los propios actos, y el respeto hacia la vida en cualquiera de sus manifestaciones. Por supuesto que a las personas que pretendan manipular, abusar, los egoístas, los vampiros energéticos, los ambiciosos, los explotadores, los intransigentes, los hipócritas y en general todos los que no tienen conocimiento sobre el amor ni están interesados en...